Pabellón de Seda
Paloma Cañizares
Patio COAR – Concéntrico 09
El pabellón de seda es el primer proyecto de las telas armadas, investigación sobre las posibilidades estructurales de los textiles. Si entendemos la estructura de la tela como la armadura de un forjado, la rigidizamos y la plegamos podemos conseguir una superficie autoportante de una esbeltez y ligereza extraordinarias. Si este elemento se conforma en un molde, conseguiríamos hacer un elemento prefabricado modular que al mismo tiempo es estructura y cerramiento con un sistema de montaje sencillo y de gran versatilidad.
La seda es una de las fibras naturales más resistentes, a misma sección es cuatro veces más resistente que el acero. Esto nos proporciona un tejido, que rigidizado, tendría unas posibilidades estructurales cuantificables. También la ligereza de la seda es otra de las cualidades que les interesa para conseguir el binomio resistencia-ligereza buscado.
La geometría es el siguiente factor fundamental para lograr que sea autoportante y aquí las posibilidades formales son infinitas si bien hay que adaptarse a las limitaciones de los anchos de las telas 1,35 m. en este caso. Para este primer pabellón, se ha dibujado un elemento sencillo de tres puntas para hacer el molde. Este, se repetirá 12 veces para formar un dodecágono. El conjunto resultante es estable en sí mismo, es estructura, cerramiento y crea un espacio. Todo a partir de un elemento de 0,5 mm de espesor utilizado principalmente en la indumentaria y la decoración.
El resultado es un pabellón en forma de estrella, de ahí su color dorado. En el interior, la piel perforada deja pasar los rayos de luz, esta vez de otra estrella, que es la que nos ilumina todos los días. Su investigación busca nuevas posibilidades de construcción: más rápidas, más ligeras, modulables, reutilizables, adaptables y con posibilidades plásticas infinitas.