Fuente urbana
Un Parell d’Arquitectes
Plaza de San Agustín – Concéntrico 09
La intervención recupera la fuente como símbolo de urbanidad. La fuente era el último eslabón del arte de domesticar el agua y traerla a la ciudad, antes que esta llegara al grifo de las casas. Remataba un complejo sistema de regulación, captación y distribución. Antes de reducirse a un elemento de mobiliario urbano, la fuente era arquitectura. Una arquitectura, recurrentemente fastuosa, que desarrollaba un papel determinante en la configuración urbana y tenía la capacidad de construir un lugar caudal de encuentro y relación social.
Una fuente efímera reconfigura el cruce entre la plaza de San Agustín y la calle Portales. Acota el salón presidido por la fachada barroca del Palacio de Espartero y ladeado por el Palacio de Correos con su pareja de torres. Al mismo tiempo, reconoce como plazoleta esta intersección de la calle Portales, sumando un elemento vertical entre el campanario de la iglesia de Santa María de la Redonda y la chimenea de la antigua Tabacalera.
Su geometría cuadrúpeda dibuja cuatro fachadas cóncavas ornamentadas. En cada una de ellas, un bodegón, una natura muerta de animales, objetos y figuras, construye un retablo donde el agua, los reflejos y el sonido estimulan el ejercicio de la contemplación en el espacio público y alteran la atmósfera del lugar.