Lenguaje

BEAR (Ane Arce, Iñigo Berasategui)

La calle a 10 años

Las ciudades son lugares, las ciudades son personas, las personas construyen relatos que atan los lugares a su tiempo y espacio. He aquí un relato imaginado sobre un presente y un futuro del la Glorieta de un Doctor enamorado de las flores.

El árbol que quiso ser orden

En los tiempos de tecnologías de mano y pantallas de vida, una gran plaza repleta de plataneros y sus calles aledañas se muestran agazapadas tras vehículos aparcados. El Círculo Logroñés, noble institución cultural, espera que su mirada se ordene y encontrar en ese frente un interlocutor adecuado con el que devolver el esplendor a su entorno.
Decía Machado que todo lo que no es folclore es pedantería y no sé si podríamos añadirle que un puñado de árboles tampoco son una plaza. Aquí aterrizan nuestros primeros protagonistas.¿Puede una propuesta que es solo lenguaje cambiar su entorno?

El reto es mayúsculo: ¿cómo con pequeñas actuaciones superar el asfalto, los coches, las señales o el ruido?, ¿cómo vencer ese lenguaje del automóvil y la infraestructura y acercar la calle a su condición de lugar? Repensar la calle es entender también que la temporalidad es su gran aliado ¿qué sentido tiene conformar el espacio para usos permanentes cuando mediante horarios y gestión podemos tener todos?

Primer ACTO (Concéntrico)un gran interior

Imaginemos una plaza que no es sino un “gran interior”, un paisaje doméstico envuelto en un límite.

Esta primera actuación es así la construcción de un borde. El disfraz de columna con el que los árboles del borde de la Glorieta se travisten, busca un doble mensaje: por un lado el símbolo, el arranque de un relato, la introducción del lenguaje arquitectónico sobre la naturaleza. Un choque buscado donde el civitas se une a la naturaleza. el museo es calle para con un simple gesto re-significar lo que pasa tras él. Por otro lado, crear un peristilo, un límite, un perímetro con el que acotar un interior cuyas reglas están por escribir.

Insertando este corpus blando de orden clásico sobre los árboles, los convertimos en arquitectura. Diferenciando las hiladas perimetrales de la plaza creamos una marca en la excesiva masa arbórea y lanzamos una respuesta diferenciada al entorno. La creación de una llamada a transgredir ese umbral, a re-significar su interior.

Segundo ACTO liberación de los objetos cautivos

El mobiliario inmóvil de las ciudades no solo constituye una paradoja etimológica, si no una limitación en uso y disfrute.

La segunda acción que se propone realizar durante el festival es la acción mecánica de desatornillado de los bancos y mobiliario de la Plaza del Doctor Zubía. Un acto simple que permite la libre asociación y uso de los mismos en todo este nuevo interior público, dónde el usuario supera su condición Debordiana de espectador para ser el protagonista del espacio, y otra vez el espacio.

Tercer ACTO un techo y un horario

La idea tras el festival es la consolidación espacial del asalto. la fugaz idea plástica de la columnata debe fijarse espacialmente. para eso, este tercer acto busca construir una infraestructura abierta que reconozca este perímetro y lo configure a través de un simple sistema de cables y catenarias que posibilitan su techado, iluminación o control horario. una estructura metálica rítmica, simple y abierta que consolida la glorieta como ese interior, alberga siempre su potencialidad indeterminada y responde arquitectónicamente a su entorno. De esta forma, se define una escala urbana más amigable en el interior de la plaza. un paraíso cercado que intenta atrapar la estructura humana de Logroño. La respuesta arquitectónica hacia los bordes de la glorieta ayuda a los edificios institucionales, como el Círculo Logroñés, poniendo en valor su carácter monumental e incorporándolo en el mapa de las percepciones cotidianas.

El espacio interior adquiere potencialidad para el encuentro, aquello que es constitutivo de la vida en las ciudades, asegurando la apropiación urbana y la consolidación de los espacios públicos por medio de la construcción de escenarios urbanos.

Cuarto ACTO borrado y desespecialización (la nieve de Van Eyck)

La calle nevada de Van Eyck es la celebración de un cambio de paradigma; es el camino del borrado y desespecialización. Ruptura entre diseño urbano y función.

Reconocer la ciudad implica también fomentar su condición necesariamente ambigua y libre. Quitar el pavimento es borrar la capa profiláctica de especialización rodada que niega las necesidades estructurales del suelo. la des-pavimentación con tierra de Albero retoma una imagen urbana tradicional, dotando a la calle de pavimentos drenantes sin la necesidad de mover las cotas existentes. A través del suelo absorbente se gestiona el filtrado del agua de lluvia al terreno, sin agregar caudal de agua en la red pluvial. Estas conformaciones de solado históricas, además de tener un bajo mantenimiento, son capaces de reducir el efecto isla de calor

En esta propuesta para la ciudad de Logroño, nos interesa trazar puentes sobre los abismos, confrontando a la naturaleza y arquitectura. A partir de recomponer límites, crear interiores y borrar huellas.

ACTO FINAL. Contagio y replica

Un vez rehabitado el espacio central de la Glorieta del Doctor Zubia se propone un acto final de superación de los límites donde el borrado infraestructural contagie el entorno. Para extender la huella de la intervención, planteamos establecer una manzana permeable comprendida entre el tramo de la calle Duquesa de la Victoria desde la Glorieta del doctor Zubía hasta Avenida de Colón, redireccionando el flujo del tránsito vehicular hacia la Avenida de la Paz, donde es posible generar un recorrido perimetral mediante pequeñas intervenciones que permiten preponderar el recorrido peatonal.

BEAR (Ane Arce, Iñigo Berasategui)

BEAR es una oficina de arquitectura asentada en Bilbao que explora las posibilidades de la arquitectura como práctica discursiva. Dirigido por Ane Arce e Iñigo Berasategui, BEAR retoma su actividad en 2021 tras operar desde 2018 como AZAB. Sus trabajos cuentan con importantes reconocimientos y publicaciones en medios especializados nacionales e internacionales. Cabe destacar el premio Peña Ganchegui 2019 a mejores Arquitectos Jóvenes Vascos, Premio Egurtek 2020 o reconocimientos varios en Arquia Próxima y BEAU.